La capital centroamericana se convierte en pionera en América Latina con una medida innovadora que podría inspirar a otras ciudades del mundo.
Un acuerdo disruptivo entre la alcaldía y Towerbank
La Ciudad de Panamá dio un paso decisivo hacia la modernización financiera al aprobar el uso de criptomonedas para el pago de impuestos municipales.
La medida fue impulsada por el alcalde Mayer Mizrachi y respaldada por el Consejo Municipal, estableciendo un acuerdo con Towerbank como intermediario.
Este banco será el encargado de recibir pagos en activos digitales y convertirlos automáticamente a dólares estadounidenses, asegurando que los fondos lleguen al municipio en moneda fiduciaria.
Cripto como opción, no obligación
El alcalde Mizrachi subrayó que el uso de criptomonedas será totalmente voluntario. No sustituirá a los métodos tradicionales de pago ni implicará costos adicionales para el gobierno local, lo que convierte a esta medida en una alternativa inclusiva y sin barreras para los ciudadanos.
Panamá se alinea con una tendencia global
Esta iniciativa se suma al movimiento internacional que busca integrar los criptoactivos en la vida cotidiana. Países como El Salvador ya los han adoptado de manera oficial, mientras que otros, como Estados Unidos, exploran marcos regulatorios que favorecen su implementación.
Críticas y desafíos por delante
Aunque el avance es significativo, algunos expertos han manifestado inquietudes sobre la volatilidad de los criptoactivos y los posibles riesgos fiscales asociados, especialmente considerando que Towerbank tiene sede en las Islas Caimán, un paraíso fiscal.
