JP Morgan pronostica BTC a $170K en medio de dudas en el mercado

Mientras bitcoin acaba de caer por debajo de los 100.000 dólares, JP Morgan reaviva el debate sobre la valoración del activo insignia. En un documento publicado el miércoles, el banco estadounidense estima que BTC está muy infravalorado en comparación con el oro. En su opinión, el precio justo de bitcoin rondaría los 170.000 dólares. Este análisis reaviva el debate sobre la valoración real del activo, en un contexto de mayor volatilidad y un mercado en busca de dirección.

JP Morgan ve un bitcoin infravalorado frente al oro: ¿hacia un potencial de 170.000 dólares?

En una nota dirigida a sus clientes el miércoles 6 de noviembre, JP Morgan sorprendió al mercado con una proyección audaz. Bitcoin estaría ampliamente infravalorado en comparación con el oro, según un enfoque comparativo basado en la volatilidad, a pesar de una correlación que alcanzó 0,85.

Más específicamente, el banco explica que la relación de volatilidad BTC/oro ha caído a 1,8, lo que significa que bitcoin se considera 1,8 veces más riesgoso que el oro. Aplicando esta relación a la valoración relativa de ambos activos, los analistas estiman que existe un margen de subida mecánica significativo para BTC.

“Teniendo en cuenta esta relación, que implica que bitcoin actualmente consume 1,8 veces más capital de riesgo que el oro, entonces mecánicamente, la capitalización de mercado de bitcoin en 2,1 trillones de dólares debería aumentar cerca de un 67 %, lo que implica un precio teórico cercano a los 170.000 dólares”, se puede leer en el informe.

Este análisis se basa en una metodología cuantitativa específica del banco y fundada en la dinámica de mercado entre los llamados activos refugio. En apoyo a su razonamiento, JP Morgan destaca varios hallazgos:

• El histórico rally del oro en octubre condujo a un aumento de su propia volatilidad, haciéndolo temporalmente más riesgoso de lo habitual;

• La relación de volatilidad BTC/oro, que cayó a 1,8, hace que bitcoin parezca relativamente más estable de lo esperado en comparación con la evolución del oro;

• La valoración ajustada al riesgo de BTC debería reflejar teóricamente esta dinámica, de ahí el objetivo proyectado de 170.000 dólares en un horizonte de 6 a 12 meses;

• El modelo utilizado se basa en un enfoque mecánico, sin integrar elementos especulativos o narrativos en torno a bitcoin, lo que según JP Morgan refuerza la solidez de esta estimación.

Para el banco estadounidense, esta configuración crea una ventana de oportunidad estratégica para los inversores que buscan activos no correlacionados y valorados racionalmente.

Perspectivas divergentes: cuando otros actores rebajan sus ambiciones

Frente a esta lectura optimista, varios actores del mercado presentan un diagnóstico completamente diferente. El mismo día en que se publicó el informe de JP Morgan, bitcoin cayó por debajo del umbral de los 100.000 dólares, rompiendo un soporte psicológico importante por primera vez en cuatro meses.

Este descenso es interpretado por algunos como una señal de vulnerabilidad persistente. Tras esto, Galaxy Digital anunció una revisión a la baja de sus proyecciones de precio de BTC para fin de año, reduciendo su objetivo de 185.000 a 120.000 dólares.

Para justificar este ajuste, la firma cita varios factores: presión macroeconómica persistente, especialmente tensiones comerciales y políticas arancelarias, así como el crash del 10 de octubre, considerado el mayor episodio de liquidación en 24 horas en la historia cripto.

A esto se suma una cifra preocupante: según Galaxy, casi 400.000 BTC fueron volcados al mercado por ballenas en octubre, contribuyendo a aumentar la presión vendedora. Este movimiento de capital se enmarca en una tendencia general de reposicionamiento por parte de inversores institucionales, que ahora parecen diversificar sus exposiciones hacia otros activos o temáticas competidoras.

“Bitcoin ha entrado en una nueva fase, lo que llamamos la era de la madurez”, explica Alex Thorn, jefe de investigación en Galaxy. Cree que los ETF, al absorber una parte creciente de la liquidez, ahora ralentizan el ritmo de las subidas.

Esta divergencia interpretativa entre JP Morgan y otras instituciones como Galaxy ilustra la complejidad actual del mercado cripto. Mientras algunos ven una oportunidad estructural a medio plazo, otros favorecen una lectura más cautelosa basada en los datos inmediatos del mercado. Para los inversores, el reto ahora es arbitrar entre estas dos narrativas: la de un activo infravalorado listo para rebotar, y la de un mercado en transición hacia un crecimiento más moderado. En cualquier caso, estas divergencias ponen de relieve que el precio de BTC ya no se reduce a una lógica de burbuja o exuberancia especulativa: se está convirtiendo en un activo analizado, comparado y escrutado a través de metodologías financieras clásicas.